En 2020 se sancionó la Ley 27.574 de Defensa de los Activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad que restituye el rol preponderante del FGS para el desarrollo económico argentino, en el marco de un modelo de crecimiento con inclusión social. Esta ley se definió con el objetivo de proteger el fondo público más importante de Latinoamérica que se desguarneció con las políticas del Gobierno de Cambiemos, particularmente financiando la Reparación Histórica (RH), con el dinero del FGS. En este sentido, se establece que la RH se financie a partir de este momento con aportes del Tesoro Nacional, dotando de previsibilidad al FGS y preservando su valor en el tiempo.
Por otro lado, se recupera una de las principales funciones del Fondo de Garantía que se basa en la inversión en proyectos productivos. La creación del Fondo de Programa de Inversiones Estratégicas destinó 100.000 millones de pesos para inversión productiva, siendo la primera la construcción del espigón N°9 del puerto de Mar del Plata que aumentará su capacidad productiva un 33%, en una obra de 24 meses que generará puestos de trabajo. Esta obra fue anunciada el 16 de enero por la titular de la ANSES, Fernanda Raverta, y el Ministro de Economía, Martín Guzmán (foto).
La creación del Fondo de Programa de Inversiones Estratégicas destinó 100.000 millones de pesos para inversión productiva.
En este punto cabe destacar que, en virtud de esta capacidad que posee el FGS de potenciar y dinamizar la economía local la Ley 24.241 actualizada por la Ley 27.260, establece que el FGS debe invertir entre un 5% y un 50% de su cartera en proyectos productivos, inmobiliarios o de infraestructura a mediano y largo plazo en la República Argentina. En diciembre de 2015, finalizando la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, las inversiones productivas representaban casi el 13% del valor total del fondo. Entre los principales proyectos en donde el FGS ha sido promotor de inversiones pueden mencionarse los Planes de viviendas en Salta, San Juan, Chaco, La Rioja, Mendoza, Entre Ríos y Río Negro y el financiamiento del PROCREAR; la finalización de la central atómica Atucha II y otras centrales energéticas y el impulso a distintas obras públicas para ampliar el alcance de los servicios públicos y mejorar la infraestructura vial. Sin embargo, luego de la debacle que significó para el país un nuevo gobierno neoliberal, en diciembre de 2019 solo el 3,7% del valor del FGS se encontraba destinado a proyectos productivos, incumpliendo lo estipulado por la Ley.
Este tipo de decisiones tomadas por el macrismo, exponían el desprecio que el gobierno tenía sobre lo público, desprotegiéndolo y buscando llevarlo a la quiebra para justificar su ajuste y privatización. En este sentido, la evolución del valor en términos reales y en dólares del FGS entre 2016 y 2019 son contundentes. A diciembre del 2015 el FGS presentaba un valor de 664.029 millones de pesos equivalentes a 65.000 millones de dólares. Hacia diciembre de 2019, el valor del fondo era de 2.387.780 millones de pesos, equivalente a 37.910 millones de dólares. En términos reales, la caída del valor del FGS entre diciembre de 2015 y diciembre de 2019 fue del 4,7%. En dólares, el resultado fue mucho peor: entre el 9 de diciembre de 2015 y diciembre de 2019 el valor del FGS medido en dólares cayó un 21,9%. Entre 2015 y 2019 el valor del FGS se redujo un cuarto de lo que valía, medido en la moneda estadounidense.
Finalmente, la Ley 27.574 también estableció condonar los intereses acumulados por la suspensión en el pago de las cuotas de los créditos ANSES para llevar alivio a las familias que se endeudaron durante los últimos años para hacer frente al pago de tarifas, medicamentos y otros consumos esenciales. Adicionalmente, se anunció una nueva línea de créditos ANSES con tasas más bajas buscando reactivar el círculo virtuoso de la economía.
La caída del valor del FGS entre diciembre de 2015 y diciembre de 2019 fue del 4,7%. En dólares, el resultado fue mucho peor: cayó un 21,9%.
Repasando brevemente, el FGS se creó a raíz del Decreto N°897 del 13 de julio de 2007 mediante el cual se traspasaron los fondos que, hasta entonces, gestionaban las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP). El objetivo principal que tiene el FGS es lograr rendimientos directos e indirectos generados por las diversas inversiones que realiza su administración. Con estos fondos, las distintas administraciones del fondo realizan inversiones en proyectos productivos y de infraestructura que dinamizan la economía a través de la generación de nuevos puestos de trabajo, incrementando los ingresos de ANSES a vía aportes y contribuciones y, gracias al efecto multiplicador, traduciéndose también en incrementos en la recaudación tributaria. Así, el FGS no sólo tiene como objetivo proteger y aumentar los fondos que dispone, sino que también los puede utilizar de forma inteligente para continuar fomentando el círculo virtuoso de la economía, contribuyendo a robustecer el sistema previsional y garantizar su sustentabilidad.
El Gobierno de Alberto Fernández recupera con este tipo de políticas el rol preponderante del Estado en el desarrollo económico del país. Protegiendo el Fondo público más importante de Latinoamérica y restituyendo su rol central en las inversiones productivas, se incentiva una dinámica virtuosa en la cual la creación de empleo de calidad y el consumo interno reactivan los engranajes del país incluyendo a todos y todas dentro de este nuevo sendero de crecimiento.
*Secretario General de ANSES