El jefe del bloque del Frente de Todos (FdT) en la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner, dijo hoy que “lo que está en juego” en las próximas elecciones “es lo que votó la gente en 2019” y sostuvo que en aquella oportunidad “la gente no eligió el plan del Fondo Monetario Internacional (FMI)”, sino que se expresó “contra de lo que estaba haciendo (Mauricio) Macri en el país”.
“Necesitamos que crezca heterogéneamente la Argentina”, destacó el diputado nacional al cerrar el acto organizado por el Ateneo Néstor Kirchner, espacio que agrupa a organizaciones del kirchnerismo bonaerense, en el microestadio del club Lanús en memoria de su padre, el expresidente Néstor Kirchner, de cuya muerte se cumplirán 11 años el próximo miércoles.
En ese sentido, sostuvo que “ahora lo que está en juego es lo que votó la gente en 2019” y dijo que “la gente votó otra cosa, no votó el plan del Fondo Monetario Internacional en 2019”.
“Al contrario, votó en contra de lo que estaba haciendo Macri en el país”, advirtió Kirchner en el acto que se hizo con el lema “Imitemos el ejemplo”, en el que también participaron el subsecretario de Obras Públicas de la Nación, Edgardo Depeteri; la directora del PAMI, Luana Volnovich; el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque; la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza; y el titular de la Acumar, Martín Sabbatella, entre otros dirigentes de La Cámpora.
“Lo que está en juego en las elecciones es lo que votó la gente en 2019”.
Kirchner manifestó que “el desafío que tenemos por delante es complejo y difícil pero para eso siempre nos preparamos” y señaló que “para nosotros nunca nada fue fácil y para el pueblo argentino tampoco”.
“Si debatimos, si trabajamos, seguramente el camino será más sencillo”, advirtió y sostuvo que con este acto “la militancia demuestra que está lista para entrar cuando la llamen”.
En otra parte de su discurso, que fue interrumpida en diferentes oportunidades por cánticos de la militancia que colmó el microestadio, Kirchner señaló que “el acoso mediático sobre el gobierno es cada vez más fuerte” y afirmó que “soportamos todos los días, esta pelea diaria de la mano de nuestra gente y no dejando que nos impongan las cosas y menos el FMI”.
“El sacrificio que se le pide a la gente tiene que ser conducente como aquella cancelación con el FMI que hizo Néstor (Kirchner) y que le permitió al país poder diseñar las políticas publicas que tuvieron que ver con la realidad de la gente”, remarcó.
Por otra parte, advirtió: “Es cierto que tenemos un desafío electoral el 14 de noviembre y necesitamos diputados para poder avanzar o por lo menos evitar que retroceda la calidad de vida de nuestra gente”.
“No me vengan con cara triste nadie del Frente de Todos porque perdimos, nosotros podemos dar vuelta la taba”, destacó.
Al finalizar, remarcó que “el pueblo no puede aguantar otro ajuste” y dijo que “tiene que ser el sujeto de las políticas públicas que diseñe el Estado”.
El acto comenzó con un video que mostró al expresidente Néstor Kirchner y a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner mientras se escuchaban pasajes de sus discursos y la lectura de un documento, que estuvo a cargo de la candidata a diputada por la tercera sección electoral, Berenice Latorre.
“Hoy nos encontramos frente al desafío de construir nueva mayoría, para darle continuidad al proyecto popular y nacional”, sostuvo el documento y manifestó que “el peronismo gobierna para transformar las realidades injustas”.
A continuación, el discurso completo de Máximo Kirchner en Lanús:
Compañeros, compañeras, la verdad que… que hermoso volver a escucharlos después de tanto tiempo. La verdad que es reparador escucharlos así y verlos con esa fuerza. Han sido años muy difíciles los que han pasado. Y antes de comenzar, primero, quiero que le demos un fuerte aplauso a todas las compañeras y compañeros que trabajaron en los vacunatorios y que atendieron a la gente como la gente se merece. Felicitaciones compañeros y felicitaciones compañeras por el trabajo hecho por su propio pueblo. Y también un fuerte aplauso para los enfermeros, enfermeras, médicos y médicas que han visto tanta muerte en tan poco tiempo y se han puesto a disposición de su gente.
Han sido años muy difíciles, los cuatro años de macrismo y apenas pudimos comenzar el gobierno, este ya más de año y medio de pandemia. Son prácticamente, seis años donde nuestro pueblo cada vez la ha ido pasando peor. Es muchísimo tiempo, es muchísimo dolor, son muchísimas frustraciones y eso es lo que tenemos por delante que enfrentar y finalmente poder dar vuelta la taba para volver a poner a la Argentina en el camino correcto. Ese camino que defendimos durante los cuatro años de macrismo y también ese camino que esta pandemia nos ha demorado.
“Es claro cómo ese acoso mediático y también del poder económico sobre el gobierno es cada vez más fuerte: Néstor la llamo oposición destituyente”.
Esta pandemia ha impactado muy fuerte en todas y en todos nosotros y en nuestra gente. Ha demorado los proyectos personales de vida de cada argentino y de cada argentino piense como piense y vote a quien vote. Los que esperaban recibirse en sus carreras, los que creían que rápidamente, luego del 10 de diciembre, podíamos comenzar ese camino de reconstrucción que nuestro país necesita desandar para terminar con tanta desigualdad. Creo que entonces, el desafío que tenemos por delante es complejo y es difícil pero para eso siempre nos preparamos. Para nosotros nunca fue nada fácil y para el pueblo argentino tampoco. Si nos organizamos, si discutimos, si debatimos, si trabajamos seguramente todo será más sencillo en ese camino que necesitamos recorrer para volver a poner a la Argentina de aquel camino que nunca debió haber abandonado el 10 de diciembre de 2015.
Miren, hoy se cumplen 10 años de aquel triunfo del 2011 con la compañera Cristina. Esa inmensa victoria que construimos entre todos y todas los que estamos acá. Creo, y ustedes lo saben muy bien también, que la mano viene difícil. Muy. Pero más allá de las dificultades del presente, tenemos que tener claro el camino que debemos andar y recorrer. Nosotros venimos viendo y discutiendo y debatiendo fuertemente dentro del Frente de Todos, cual es el camino y dónde está realmente la respuesta que nuestra gente necesita. Yo les quiero decir que a cualquier dirigente que tenga responsabilidad institucional, en la parte que sea del Gobierno, que no tenga miedo, que le ponga ganas y que realmente vea como hoy, en este estadio por ejemplo, la militancia da una demostración que está lista para entrar cuando la llamen. Si algo es claro, y ustedes lo pueden ver, compañeros y compañeras… es claro y ustedes lo pueden ver todos los días y luego, más aún, del reciente resultado electoral como ese acoso mediático y también del poder económico sobre el Gobierno cada vez es más fuerte.
Néstor, allá en el tiempo, la llamó oposición destituyente, no sé si recuerdan. Este acecho permanente que estamos soportando todos los días, esta pelea diaria que todos los días tenemos que dar la tenemos que hacer de la mano de nuestra gente, creyendo en nuestra gente y no dejando que nos impongan las formas y mucho menos el fondo. Porque detrás de esas discusiones por las formas es donde nos empiezan también a debilitar como espacio político. Ni que hablar cuando hay que discutir las cuestiones de fondo.

Y ya que estamos hablando del fondo, miren cómo estará la mano que ayer al conocerse una consigna, una canción que compañeros y compañeras cantan, se transformó en noticia. De repente uno veía como todos los medios de comunicación se agarraban de una consigna hecha por militantes, por compañeros y compañeras para expresar lo que sienten, para tratar, como siempre, de confundir y tergiversar. Quien fuera presidente de la Argentina entre el 25 de mayo del 2003 y el 10 de diciembre del 2007 fue el que le pagó al Fondo Monetario Internacional. Cuesta mucho entender, cuesta mucho entender lo que quieren plantear porque aquella decisión del ex Presidente fue poner en valor el esfuerzo de cada argentina y cada argentino que hasta ese día que se decidió pagarle al Fondo, trabajó y trabajó sin cesar porque hubo un Presidente que les pidió que lo acompañaran y lo ayudaran. Y cuando ese Presidente le pidió ese sacrificio a su pueblo, ese sacrificio fue correspondido con la cancelación de la deuda. Porque muchas veces vemos cómo la clase política va a la televisión a pedirle sacrificios a los ciudadanos y ciudadanas argentinas pero ese sacrificio siempre termina en saco roto y nunca se soluciona nada. El sacrificio que se le pide a la gente tiene que ser conducente y real como fue aquella cancelación con el Fondo Monetario Internacional que le permitió, después de décadas y décadas, por primera vez a nuestro país poder diseñar las políticas públicas que tuvieran que ver con la realidad de su gente. Con esas enormes asimetrías que tenemos en la Argentina, culturales, económicas y sociales a lo largo y a lo ancho. Diseñar, pensar la Argentina desde la Argentina. Esa es la clave y ahí debe estar la respuesta y eso es lo que debemos entender: primero argentinas y argentinos y después el resto también. Si la Argentina no se piensa a sí misma, si la Argentina no cree en sí misma será muy difícil encontrar el camino de salida. ¿Saben por qué aparte? Porque esta historia ya la vimos muchas veces. Esta historia ya la vimos muchas veces. Miren: nosotros entendemos que, más allá de que los propios funcionarios norteamericanos y del Fondo confirmaron que ese préstamos de 44.000 millones de dólares que le dieron a Mauricio Macri fue para intentar ganar una elección. Miren, miren lo que habrá sido de inepto el Gobierno que le dieron 44.000 millones de dólares y perdió la elección. Y si yo les pregunto a ustedes ¿Alguien de ustedes vio el préstamo del FMI en sus barrios, en sus universidades, en sus hospitales o en las escuelas? Nada, se esfumó. Dilapidó plata prestada. Lo peor de lo peor y eso es lo que ha sucedido. Ustedes imagínense, sería muy bueno que el FMI venga a Argentina a explicar y nos muestre cuáles fueron los estudios que realizó la tecnocracia, la burocracia porque estamos dispuestos a escuchar. Porque los vamos a recibir de muy buena manera porque realmente nos intriga por demás saber esa tecnocracia, esa burocracia preparada donde siempre la derecha argentina y los medios de comunicación dicen que está lo mejor porque siempre para ellos lo mejor está fuera del país y no adentro. Si consiguen a un tecnócrata del FMI que nos diga por qué fue que le prestaron la plata y, más aún, cómo fue que imaginaron que nuestra patria iba a devolver ese enorme préstamo. Porque cualquiera de los que está aquí presente sabe muy bien que cuando va a un banco, a un lugar a pedir un préstamo no se lo dan porque son gente agradable o porque piensan igual. Le miran el recibo de sueldo para saber cuánto le pueden prestar. Y yo quiero saber qué fue lo que miraron de mi país para suponer que podíamos devolverles semejante cantidad de dinero como tenemos que devolverles, por ejemplo el año que viene, 18.000 millones de dólares.
Estamos siempre abiertos al diálogo compañeros y compañeras. Queremos escuchar, queremos que la tecnocracia y la burocracia nos enseñe cuál fue el diagrama económico que pensó para que la devolución se diera en dos años. Estamos listos para que nos desasnen y nos expliquen. Ahora, si no nos explican es muy complejo. Si no dan la cara ante el pueblo y le dicen: le prestamos por esto, aquello y lo otro, es muy difícil.
“Miren lo que Macri habrá sido de inepto en el gobierno que el FMI le dio 44 mil millones de dólares y perdió la elección”.
Pero miren, pensaba ayer mientras se desataba esa cuestión medio extraña, parece que ya no podemos ni cantar, nos están escuchando hasta las canciones. Y pensaba: qué extraño ¿no? ¿Por qué la noticia es una canción y no Mauricio Macri que fue el que tomó el préstamo? Compañeros… y les pido atención porque muchas veces en las discusiones que tenemos dentro del Frente de Todos hay algunos que quieren adjudicarle a la sociedad falta de intención de saber o de conocer lo que pasa. Y precisamente cuando sucede eso es cuando nacen los problemas. Por eso queremos discutir estos temas, porque son centrales, porque muchas veces nuestros sectores medios que trabajan en relación de dependencia o que son cuentapropistas o nuestros comerciantes piensan que el tema del FMI y el pago que reclama no afecta sus vidas. Piensa que sólo afecta la vida de los más humildes, de los trabajadores informales y de un sector del trabajo formal y no es así. Por ejemplo, cuando nuestras pymes necesitan importar insumos para poder producir, por ejemplo maquinaria, necesitan esos dólares para poder pagar afuera los fierros que hay que traer para producir. Si se lo lleva el FMI nuestras pymes no van a tener los fondos necesarios para poder producir, más, mejor y así generar trabajo de mayor calidad para nuestro pueblo, para nuestros ciudadanos y ciudadanas. El que piensa que quizás se vale por sí mismo porque tiene talento, don, oficio o una buena profesión tiene que pensar, por ejemplo un arquitecto o una arquitecta quién lo va a contratar para hacer una casa si la gente no tiene acceso a la tierra y los materiales valen lo que valen.
Todos los argentinos y todas las argentinas nos necesitamos. Todos nos necesitamos más allá de cómo pensemos y cómo votemos. Necesitamos que crezca homogéneamente la Argentina, no un crecimiento heterogéneo. La heterogeneidad de crecimiento cuando crecen sólo los que están más arriba y los de abajo nada, la Argentina ya lo vivió y lo ha vivido de diferentes maneras. Por eso es un tema central el del FMI, no se trata de chauvinismo nacionalista, se trata de racionalidad y pragmatismo económico. Saber con qué recursos contás para saber cómo organizás tu propio país.
Y sé muy bien que el esfuerzo nunca es en vano porque cuando habla, ya sea acá, cuando una compañera o un compañero habla en su barrio, siempre alguien está escuchando. Siempre alguien está prestando atención y es ahí donde la militancia se hace fuerte. Todos los días en todos los lugares, en el barrio, en la escuela, en la universidad, en el comercio que trabajes o tengas, hay que hablar con la gente. Hay que hablar con la gente. Basta por favor de hacer focus group, cosa que no entiendo… Es mucho más fácil, es mucho más fácil, hay que dar la discusión porque miren… Yo ya con los medios de comunicación no tengo ningún tipo de ilusión. Ni siquiera han hecho una autocrítica del Presidente que pusieron entre el 2016 y el 2019 porque, si algo quedó claro, que Mauricio Macri nunca hubiera sido Presidente de la Argentina si no hubiera sido con el apoyo de los medios de comunicación que ahora miran para otro lado y ponen cara de distraídos. Porque aparte, lo que se está disputando compañeros y compañeras y lo que está en juego es lo que votó la gente en 2019. Ayer escuchaba un candidato a diputado nacional de la oposición, de aquí de la provincia de Buenos Aires, que decía que sí o sí había que arreglar con el Fondo. Que si arreglábamos la íbamos a pasar mal pero que mucho peor era no arreglar. ¿Se dan cuenta lo que están diciendo? ¿Se dan cuenta el nivel de extorsión al que someten a la gente? La gente votó otra cosa, no votó el plan de gobierno del FMI en 2019. Por el contrario, votó en contra de ese plan que es el que estaba haciendo Macri en el país. Por lo tanto, lo que tenemos que tener claro en este gran plenario, en este gran acto de la militancia, es que la presión que sufre nuestro gobierno es, precisamente, que no importe lo que la gente vote en una elección, que gobierne quien gobierne las decisiones se tomen afuera del país y no en la Casa Rosada que es donde la gente pone al Presidente para que gobierne.

Entonces… Y ya sé, dirá alguno que la gente lo votó a Macri. Y es verdad, la gente lo votó a Macri pero Macri engañó a nuestra sociedad. Macri no le dijo lo que iba a hacer, hizo todo lo contrario. Fue una gran estafa electoral y para colmo esto, y para colmo vamos a una elección en el 2019 contra un formidable frente político, económico, comunicacional al que le habían dado 44 mil millones de dólares para ganar la elección y el pueblo dijo basta. Pero dijo basta en serio porque algunos usan la palabra basta pero no saben lo que es cuando lo escuchan de la boca del pueblo la palabra basta, compañeros y compañeras. Una cosa es que la diga la clase política en la tele y otra cosa es que la diga la gente en la calle compañeros y compañeras.
Entonces, y si a alguien le queda alguna duda y perdón que me demore con esto, es como están planteadas las cosas. Miren como será de extraño todo lo que sucede que quien le pagó al FMI 9800 millones de dólares es permanentemente atacado por los medios. Y quien tomó la deuda, Mauricio Macri, nadie le dice nada. ¿En serio? ¿En serio es así esto? Este es el problema que tenemos y por eso tenemos que hablar mucho con nuestra gente. Ustedes imagínense lo que fue este año y medio para nuestro pueblo, para todos nosotros y para todas nosotras, rehenes de la pantalla sin casi poder vernos, sin casi poder debatir, discutir, llevar nuestras actividades como las llevábamos hasta el 10 de diciembre o hasta el 19 de marzo del 2020. Fuimos rehenes de la pantalla. Si ustedes ven como se comportan y cómo acosan al Gobierno desde los medios de comunicación van a tener parte de la respuesta de lo que hay que hacer. Y lo que hay que hacer es lo que hemos hecho siempre: nos ponemos de pie, con la frente alta, salimos, organizamos, caminamos, lo hacemos con amor. No respondemos a ninguna provocación porque sabemos lo que queremos y lo que queremos es muy simple, queremos que nuestra gente viva mejor y de ahí nace el compromiso que todos nosotros tenemos.
Cuando uno ve en este acto que han organizado los ateneos de la tercera sección de la provincia de Buenos Aires, formidable instrumento creado para poder encontrarnos, compartir, debatir, disentir… Compartir las realidades relativas para encontrar nuestra síntesis superadora. Cuando más nos quieran dividir es cuando más nos tenemos que unir. Y cuando más nos unimos es cuando más nos decimos las cosas en la cara para poder salir adelante. No nos vamos a juntar callados, queremos discutir, debatir y saber bien a dónde va nuestro país.
También vimos en los últimos días la discusión que se está dando por el tema de precios. Y ustedes lo saben ¿o no? Ustedes lo ven todos los días en un kiosko, en un almacén o cuando van al supermercado. Y aquí lo que hay es una enorme disputa por la distribución del ingreso. El sector más concentrado de la producción de alimentos busca apropiarse de todos los recursos que vuelva el Estado para tratar de que su sociedad pueda paliar de la mejor manera esta pandemia. Y por esas cosas de curioso y de andar mirando, miraba que en Ecuador por ejemplo, un banquero que llegó a Presidente en contra del partido de Rafael Correa, el señor Lasso. El señor Lasso, por ejemplo en Ecuador, le comunico acá a Larreta, Macri, Santilli y compañía, un banquero ha congelado por ejemplo el precio de los combustibles en Ecuador y también el de las frutas y verduras. Les comento también, por si no están atentos, en la Brasil de Bolsonaro se están peleando entre ellos porque los liberales que están adentro del Gobierno no quieren que haya mayor inversión social. Lo que sucede en nuestra región, lo que vimos en Chile allá por octubre del 19… Miren lo que sucede en Chile. ¿Se acuerdan cuántas veces los escucharon decir que el modelo que teníamos que seguir la Argentina era Chile? Recuerden las jornadas de octubre del 19 en Chile. Y eso terminó… Miren: fue un problema que empezó con un aumento de 30 centavos del subte y a partir de ahí no lo atajaron más el problema y la gente fue clara y decía una cosa. No son 30 centavos, son 30 años. El agotamiento de las sociedades ante el gobierno de las corporaciones es cada vez más notable y ahí es donde ciudadanos y ciudadanas deben organizarse. Por eso los ven tratando de instalar la cuestión de la antipolítica, porque cuando la gente se aleja de sus ideas, de sus compañeros, de sus compañeras, del compromiso con el prójimo es cuando ellos se hacen fuerte. Por eso tenemos que buscar a la gente y a la sociedad, para que el pueblo se pueda empoderar. Ciudadanos y ciudadanas que le digan basta y que le pongan un límite a estas corporaciones que constantemente se abalanzan sobre el fruto del trabajo de los argentinos y de las argentinas.
“Cómo será de extraño todo lo que sucede, que quien le pagó al FMI 9.800 millones es atacado por los medios, y a quien tomó la deuda, Mauricio Macri, nadie le dice nada.”
No es menor comprender cuál es la disyuntiva que existe hoy, la gran batalla que el pueblo argentino tiene que dar. Y la tiene que dar piense como piense y vote a quien vote también. Cuando uno ve las consecuencias de esta pandemia no entiende cómo la clase política que vemos en la televisión o los conductores cómodos y con aire acondicionado hacen análisis económicos del estado actual de nuestro país sin hablar de la pandemia. Yo les puedo asegurar, realmente, que hemos cometido errores y en nombre del Frente de Todos les vengo a pedir disculpas a cada compañero y a cada compañera militante. Hemos hecho lo mejor que pudimos. Parece que algunos tienen miedo de pedir las disculpas cuando no hacen las cosas bien. No pasa nada, con la gente de frente y confiando en ella siempre porque ¿cómo se piensan que se ganó en agosto y en octubre del 19? ¿Por qué se ganó? ¿Cómo se ganó? Se ganó con la gente, se ganó con la militancia, con los compañeros, con las compañeras y fundamentalmente se ganó por la decisión de una compañera que no se fijó donde iba ella sino que se fijó realmente lo que había que hacer para construir la victoria.
Es increíble y no quiero que nos pase a nosotros como militantes, es increíble compañeros y compañeras cuando muchas veces vemos cómo se disputan algún sillón o algún lugar cuando la compañera Vicepresidenta, para que el pueblo pudiera salir de la encerrona que lo había metido Macri, se corrió de candidata a Presidenta. Miren lo que tiene que aprender aquellos que siempre viven explicándonos todo.
Miren… porque aparte es cierto que tenemos un desafío electoral en un par de semanas el 14 de noviembre. Y también es cierto que necesitamos diputados y diputadas en diferentes ámbitos para poder avanzar o por lo menos para evitar que retroceda la calidad de vida de nuestra gente. Y miren lo que les estoy diciendo y quiero que me escuchen muy bien. Yo quiero que me escuchen muy bien porque el poder económico y el poder mediático, seguramente, después del 14 va a intensificar esto que ustedes están viendo hasta el día de la fecha y abalanzarse sobre el Gobierno. Y es allí donde nosotros siempre nos crecemos y nos hacemos fuerte porque sabemos bancar la parada, sabemos dar la pelea y también, recién lo hablaba con el Cuervo antes de subir… Miren: nosotros quedamos en un momento entre el 2016 y el 2019, éramos 60 diputados nacionales. Si 60 diputados nacionales ayudaron a construir una victoria política como la del 2019, imagínense si tenemos 118, 120 y a nuestro pueblo organizado y en la calle.
Necesitamos… compañeros, compañeras… la verdad que gracias… Es un gran mimo y un gran abrazo para todos los compañeros y compañeras. Estamos de vuelta parece ser… Bueno canten. ¿Quieren cantar? Yo los escucho.
Bueno, señor Presidente, señor Gobernador, si tiene alguna duda si estamos dispuestos a ir para adelante… Chifle que nosotros estamos. Creo que… Acá se canta, no hay que poner un cassete ni un disco, acá se canta.

Compañeros, compañeras, pensar que nos dicen que no somos peronistas. Acá no hace falta un grabador ni un parlante, acá lo canta la gente compañeros y compañeras. Que aprendan aquellos que van a hablar de peronismo si hay más o si falta, a dónde está el peronismo compañeras y compañeros. La verdad que lo que tenemos por delante es una gran tarea. El 14 es un paso más pero lo más importante sobrevendrá después. Yo les quiero decir: hace muchos años les dije dos cosas en el acto de Argentinos Juniors. Una: que no había apellidos milagrosos y sigo creyendo que no hay apellidos milagrosos, lo que hay y genera realmente milagros es cuando las personas, los seres humanos, los militantes, se ponen la patria al hombro para sacarla adelante. El verdadero milagro es creer, es tener fe que podemos construir una Argentina diferente y no resignarnos a este país al que nos quieren someter por mandato del Fondo Monetario. Y la segunda es que mis compañeros y mis compañeras son mejores que yo. Así que, la verdad es que siempre toda mi admiración para cada uno y cada una de ustedes.
Bueno, la verdad que dan una fuerza, llenan el espíritu… Es un hermoso acto, la verdad que escucharlos y verlos así contentos, como les dije antes, es un bálsamo, repara el alma, da ganas. Y creo que lo que tenemos por delante es muy complejo y muy difícil, pero con ustedes compañeros y compañeras no hay tarea imposible. Vamos a insistir hasta que aquello que parece hoy imposible, por fruto del trabajo y el compromiso se vuelva inevitable y de esa manera darle a nuestra gente, piense como piense y vote como vote, la posibilidad de vivir una patria mejor.
Y para terminar dense cuenta y que se dé cuenta la clase política argentina, que no es víctima de nada. Las únicas víctimas que hay en toda esta historia son las personas que no llegan a fin de mes, que no le pueden dar de comer a su familia. ¿Qué es esto? ¿Qué es esto de que hay un mal resultado electoral y aparecemos con cara triste? Hay que estar contentos y hay que dar la pelea. Nadie nos pide estar, es una decisión propia. Y si alguno tiene alguna duda de nuestro compromiso pues bien, hoy estamos aquí recordando y anticipando en algunos días al 27 de octubre. Tenía 60 años, laburó hasta el final, se la bancó de pecho con todos los que siempre quisieron poner de rodillas a la Argentina. Que no me venga ningún dirigente del Frente de Todos con cara triste a decir que no se puede. Compañeros y compañeras, nosotros podemos dar vuelta la taba, no sólo en las urnas sino la que más importa que es que la sociedad argentina vuelva a encontrar el rumbo de la producción, del trabajo, de la educación y de la salud. Esa Argentina…
Compañeros, compañeras, para concluir les voy a pedir un favor para esta última parte de la campaña. Cuando vayan casa por casa, en vez de preguntarle a quién van a votar preguntémosle cómo están, qué les pasó durante la pandemia. La elección va a pasar compañeros y compañeras pero si nuestro pueblo está triste no va a poder vencer. Necesitamos un pueblo y volver a conversar con él…
Compañeros, compañeras, preguntémosles cómo están como hacemos siempre. El 14 es un paso más y después tenemos años por delante donde le tenemos que asegurar a la gente la representación de lo que piensa. No podemos defaultear a la creencia de esa enorme masa de argentinos y argentinas que en octubre del 19 fueron a decirle basta a Macri y basta al Fondo Monetario. Les pido por favor, como les decía recién, la mayor de las humanidades, nada de enojo, abrazarlos, escucharlos, compartir como hacen siempre que sé que lo hacen. Pero hay que hacerlo más aún y redoblar esfuerzos porque hay mucho dolor en nuestra gente. No sólo el dolor de quien perdió a un ser querido, el dolor de haber visto pasar tanto tiempo lejos de la habitualidad de la vida. Porque los argentinos y las argentinas hemos superado muchísimas crisis pero en esas crisis lo que nunca nos había pasado era no poder vernos, no poder compartir lo poco que hubiera. Es la primera vez que tenemos un experimento que desató una pandemia de estas características. Por eso yo lo que les pido que laburemos como siempre hasta el 14 con todo, pero después del 14 redoblamos esfuerzos, estamos en todos lados como siempre nos pidió Néstor y Cristina. Con ese convencimiento que tenemos y aparte nosotros sin ustedes no somos nada. Ustedes son la fuerza. No hay discurso creativo, no hay discurso maravilloso que sirva si la gente no te ayuda y no te acompaña y aparte, cuando participa te corrige. Mientras más argentinos y argentinas se vuelquen a la política en el partido que quieran, más seguro que nuestro país va a salir más rápidamente de esta crisis que desató primero Macri y que la pandemia vino a profundizar.
“Cuando más nos quieren dividir, es cuando más nos tenemos que unir”.
Nunca se olviden cuando ustedes miren la televisión y los escuchen a aquellos que analizan la economía sin hablar de la pandemia. Es un acto enorme de cinismo, de cinismo y peor aún, de oportunismo en medio de tanta muerte. Entonces, si bien ya los conocemos y nada nos sorprende porque los hemos visto actuar y vemos cómo desplegaron una política de ajuste y persecución en la Argentina entre el 16 el 19 ahí andan de vuelta para completar la trilogía con el Jefe de Gobierno de la Ciudad. Sería el tercer Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, de cuatro que han sido votado sino me olvido, que sea Presidente. El primero fue De La Rua, el primer Jefe de Gobierno porteño que fue Presidente fue De La Rua y ahora, en un par de meses, se cumplen el 19 y el 20 de diciembre del 2001 cuando el pueblo dijo basta a un Jefe de Gobierno porteño que vino a ajustar toda la Argentina y que pensó que la Argentina eran sólo 40 manzanas de poder. Pero el tiempo pasó y después vino otro Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el señor ex Presidente Mauricio Macri ¿Y qué hizo? Hizo lo mismo que De La Rua, lo mismo, volvió a ajustar al pueblo, volvió a reprimir al pueblo y volvió a perseguir a quiénes pensaba diferente y así terminó y tras cartón nos vino una pandemia. Y tras la pandemia ¿quién aparece? Otro Jefe de Gobierno que se plantea como la esperanza blanca racional de los sectores de poder porteños. Es tarea de la provincia de Buenos Aires, es tarea del país entero que quien gobierne la Argentina sea alguien que realmente entienda sus asimetrías sociales, culturales y económicas y no esto que nos impone la Ciudad de Buenos Aires al resto de la Argentina de la mano de los medios de comunicación que son jefes de gobierno que administran Bruselas. Pero la Argentina no es Bruselas, es más compleja y es más difícil. La tarea que tiene la provincia de Buenos Aires es terminar con esta situación donde cada Jefe de Gobierno es Presidente y el país queda patas para arriba. Y ustedes lo vieron, un día nos mandaron a la Vicejefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Cuatro años de gobernadora y perdió por 20 puntos porque administrar la Ciudad de Buenos Aires no es administrar la Argentina y mucho menos una provincia como es la de Buenos Aires. Ni les voy a hablar de las provincias de nuestro norte grande o de nuestra Patagonia. Las complejidades que tienen nuestros territorios, las dificultades, los olvidos permanentes del poder central del resto de los argentinos y argentinas. Por eso, más allá de este 14 y lo repito nuevamente: este 14 de noviembre es un paso, lo más complejo empieza después y ahí es donde tenemos que crecer y poner firmes junto a nuestra gente. Ni atrás ni adelante, al mismo paso de nuestra sociedad para poder, definitivamente, volver a poner a la Argentina porque esta vez es diferente compañeros y compañeras. Esta vez nos es como nos pasaba a nosotros cuando éramos muchos más jóvenes donde la Argentina era todo una añoranza y el proyecto de país que decíamos que podíamos hacer nadie lo había vivido, había pasado mucho tiempo. Esta vez nosotros sabemos que es realizable porque lo vivimos, porque lo vivieron amigos, amigas, sus vecinos, sus vecinas. Entre el 2003 y el 2015 tuvimos otro modelo de país, no perfecto pero sí mucho mejor que este que vinieron a instalar los jefes de gobierno porteños con los medios de comunicación de la Ciudad de Buenos Aires.
Vamos a proponerle a nuestra gente, como siempre, algo que sepan que es tangible, que está… que no es una fantasía compañeros y compañeras porque lo hemos vivido. La única fantasía que hay en la clase política argentina es que el pueblo puede aguantar otro ajuste. El pueblo no puede aguantar otro ajuste, el pueblo necesita y las personas, estar en el centro, ser el sujeto principal de las políticas públicas que diseña el Estado. Y en los que estén acá, que estén trabajando en cualquier lugar, en el Estado, en el sector privado, por la propia o que estén buscando trabajo, tratemos a la gente bien. Hablemos con ellos, yo les pido por favor porque el engome que debe tener gran parte de nuestra sociedad, si está mirando todo el día la tele, es terrible. Hay que salir de ahí, hay que dejar ese lugar y hay que salir a construir.
Yo les quiero agradecer compañeros y compañeras porque me voy dispuesto a dar todas las peleas que haya que dar. Me voy con la firme convicción de que nada ha sido en vano, no ha sido en vano construir y pintar miles de escuelas. No ha sido en vano pagarle al FMI como hizo Néstor. No ha sido en vano enfrentarse a los poderosos por la gente. Hay que ir para adelante y el que no esté preparado en vez de ocupar un lugar para ocupar que deje el lugar para otro compañero porque seguramente tiene la fe y la esperanza para sacar esto adelante.
Compañeros, compañeras, los quiero muchísimo, todo mi respeto. Y ya saben, como siempre, a vuestra disposición. Muchas gracias porque lo de hoy es fantástico y una demostración que para aquellos que viven enlodando la política, es la militancia y la gente que cree y que sabe que puede dar vuelta la taba.
Gracias compañeros, gracias compañeras.