La agenda mediática de la semana pasada tuvo dos grandes construcciones por parte de los medios concentrados: el drama de los “varados” y la operación Pfizer en la Cámara de Diputados. Sobre la primera, el objetivo fue machacar sobre una decisión sanitaria convirtiéndola en una medida injusta que generó un efecto dramático para un universo más grande del real (aproximadamente 45.000 personas). En relación a la “operación Pfizer” mostró prácticamente como ningún otro la articulación entre Juntos por el Cambio y las grandes medios: mientras en el recinto la oposición forzaba al oficialismo a rechazar el ingreso de un tema (modificar la ley que habilitaba la negociación con Pfizer) por fuera del temario, los medios construían la idea de que la negativa mostraba su insensibilidad para avanzar en la vacunación de menores con discapacidades.
LOS “VARADOS”. En las tapas de Clarín y La Nación durante tres días, y con la colaboración de los portales de noticias de los mismos diarios y medios audiovisuales hegemónicos, se instaló como uno de los temas principales el “drama” de argentinos y argentinas que permanecen en el exterior y que deberán aguardar para reingresar a la Argentina luego de las últimas medidas del gobierno nacional. A partir de allí, predominó la construcción de un drama/calvario, sin distinciones, de un universo de 45.000 personas que en el 60% e los casos, decidieron viajar por turismo. Las características de esas construcciones fueron:
- La conformación de un nuevo sujeto víctima de las decisiones de un gobierno populista: los varados.
- El diseño de una penuria injusta que tiene como único responsable al gobierno nacional.
- La invisibilización de la pandemia como causa principal de la decisión del gobierno nacional y sus efectos.
- Una suerte de naturalización respecto a que el gobierno nacional solo toma las decisiones de manera antojadiza para perjudicar un universo específico de personas.
- En clave más global, que el gobierno cercena derechos (libertades) y que debe ser denunciado (en articulación con Juntos por el Cambio)
Los portales registraron los testimonios en primera persona para buscar empatía:



Mientras que en medios audiovisuales el objetivo fue culpar al gobierno nacional:
EL RECLAMO OPOSITOR POR PFIZER Y UNA NUEVA JUGADA MEDIOS/JUNTOS POR EL CAMBIO. Durante la semana pasada, también quedó demostrado una vez más, la articulación discursiva entre Juntos por el Cambio y los grandes medios. La oposición quiso forzar el tratamiento fuera de reglamento de la modificación de la Ley que estipulaba las condiciones para negociar las vacunas y beneficiar a Pfizer, el oficialismo se negó. Finalmente, el gobierno nacional anunció la firma de un DNU que habilitara finalmente el ingreso de las vacunas de Pfizer, lo que también fue leído como una suerte de debilidad del gobierno nacional frente a una oposición absolutamente empoderada con “la verdad” sobre el tema. A partir de esa situación, predominaron las siguientes construcciones de sentido:
- En primer lugar, se percibió una clara instalación premeditada del tema que volvió a clarificarla articulación entre Juntos por el Cambio y los medios concentrados. Mientras en la Cámara de Diputados alfiles de la oposición empujaban el tema para forzar al oficialismo a rechazarlo, los medios instalaban la noción de que el Frente de Todos se sigue oponiendo a la llegada de esas vacunas.
- La instalación apuntó a una arista: como las vacunas Pfizer son las únicas habilitadas en el mundo para menores de 18 años, el argumento opositor/mediático fue que el oficialismo en realidad se niega a vacunar a los jóvenes.
- Alrededor de la firma del DNU predominó la idea de un oficialismo finalmente terciado por el reclamo opositor. Paralelamente, la instalación de esa posibilidad a partir de la entrevista de Santiago Cafiero en TN detuvo la continuidad de la “operación Pfizer”.
- La oposición persistió en su intento de capitalización (Claudia Najul y Diegos Sartori de Juntos por el Cambio, diputados opositores, brindaron entrevistas en la mañana posterior a la sesión para referir al tema en Rivadavia) pero el avance de la vacunación (que en algún momento alcanzará el rango de menores de 18 años) y la posibilidad del DNU lo terminaron debilitando.
- La referencia a la hija de Luis Juez (menor y discapacitada) fue la estrategia narrativa fundamental de los medios concentrados. Se convirtió en la víctima clara del accionar oficial y el elemento central para construir una monstruosidad mayor a su alrededor del Frente de Todos.
Primero lo instalaron Clarín y La Nación:


Y después se ocuparon los medios audiovisuales: