Después de la repercusión internacional que tuvo la miniserie “Poco ortodoxa”, este mes se publica por primera vez en español el texto autobiográfico de Deborah Feldman que inspiró la producción de Netflix. “Lo escribí con muchísima presión, pero sabiendo que era la puerta a la libertad”, afirmó la autora en la conferencia de prensa en la que presentó “Unorthodox. Mi verdadera historia”, el libro en el que relata cómo fue su vida en una comunidad jasídica de Estados Unidos.
La miniserie “Poco ortodoxa”, desarrollada en cuatro capítulos y hablada en yiddish, cuenta la historia de Etsy -interpretada por la israelí Shira Haas- y el modo en que logra salir de la comunidad en la que vive asfixiada, bajo las rigurosas reglas y deberes del mundo jasídico.
Podría decirse que la eficacia de la serie radica en su lenguaje universal, al tratarse de una historia que habla sobre un entorno que oprime, pero al tiempo rescata los irrefrenables deseos de libertad individual: “No soporto la idea de pasar una vida entera en este planeta y no hacer todas las cosas que sueño hacer solo porque no me está permitido”, se lee en uno de los pasajes del libro que a fines de julio llegará a la Argentina, publicado por Lumen, y que desde este jueves se podrá conseguir en ebook.

La historia de Devoireh (antes de ser Deborah) es impactante, pero no es la única: “Formo parte de una red internacional que se ha ido de la comunidad, somos miles de personas. Hay mucha gente valiente que ha hecho este camino sin ninguna ayuda. Vemos un movimiento inspirador, pero por otro lado sigue siendo difícil, sobre todo para las mujeres que son tan necesarias para que la dinámica de la comunidad funcione”, explicó la autora en una videoconferencia realizada hoy con motivo de la publicación de su obra en español.
“Me fui siendo joven – continuó Deborah Feldman – sin conocimiento de cómo funciona el mundo fuera de la comunidad. En primer lugar uno tiene que buscar cómo sobrevivir, saber qué es una cuenta bancaria. En lo práctico, lo más difícil es la supervivencia financiera. Esto fue muy difícil, siempre al borde del precipicio del hambre y del estar sin techo. Hice muchas cosas para sobrevivir, por ejemplo, doné mis óvulos a un banco para conseguir dinero”.
Pero la parte más difícil, según consideró, es que cuando “uno se va no tiene nada, no tiene identidad”. “Todo lo que constituía quien eras desaparece, porque la comunidad define tu identidad. Es una comunidad colectiva no individual. Uno se va y deja de ser persona y esto produce una crisis y afecta la salud mental. ¿Cómo hace uno para vivir como persona cuando se le vacía de su identidad? ¿Cuál es el nuevo idioma? ¿Cuáles las nueva creencias? ¿Qué queremos en la vida? Son preguntas que cuestan mucho responder”, reflexionó la autora.
“Escribí el libro con muchísima presión, pero sabiendo que era la puerta a la libertad”.
“Unorthodox. Mi verdadera historia” (2012) fue el primer libro de Deborah Feldman. Lo empezó a escribir antes de abandonar la comunidad jasídica de Williamsburg, en Brooklyn, donde pasó su infancia y adolescencia entre lecturas prohibidas (de “Orgullo y prejuicio”, de Jane Austen, a Harry Potter sin escalas) que le despertaron unos irrefrenables sueños de escritora.
“El libro está escrito con una gran presión por la libertad. No pude escribirlo con el tiempo necesario para hacerme escritora, pero sabía que ese presente era la única forma para plasmar lo que estaba viviendo. Es un libro crudo, que no se ha digerido. Es real, es algo inmediato. A diferencia de las memorias, no ha habido una retrospectiva o una reflexión. En muchos sentidos, este libro no es una memoria”, aseguró la autora, que reside en Berlín junto a su hijo, fruto de su matrimonio jasídico.
Cuando “Unorthodox” se publicó por primera vez se convirtió en un arma de doble filo, porque si bien fue la puerta hacia una nueva vida, también generó muchas presiones y recriminaciones de la comunidad que Feldman había dejado atrás. A su entender, la crítica estuvo directamente relacionada con su condición de mujer: “Es una novedad, osada y atrevida, que el libro haya sido escrito por una mujer, porque en el pasado hubo otros relatos sobre la salida de una comunidad ortodoxa, pero fueron todas narrativas masculinas. Además, en este caso se suma el hecho que fue una mujer la que escribió de forma íntima sobre la experiencia femenina, algo que es muy tabú”.

El libro propone una reflexión en primera persona sobre la cosmovisión de los satmar, la comunidad ultraortodoxa que adhiere al judaísmo jasídico y que hoy cuenta con casi 120.000 miembros en todo el mundo, de los cuales casi 60 mil viven en el barrio neoyorquino de Brooklyn.
“No encajaba del todo en esa comunidad: era la hija de un matrimonio fracasado, mis padres eran artículos defectuosos y a mí me trataban como si yo no fuera una de ellos. Era la mancha.Creo que esto me dio la perspectiva de verme como alguien que estaba en el margen, lo que me llevó a hacerme preguntas, a desconectar de lo que los demás aceptaban como algo normal, y a buscar una salida”, consideró.
Como destaca la autora, las mayores críticas le llegaron “del mundo judío en general”. “El judaísmo – afirmó – ha pretendido ser demasiado vulnerable porque ha sido un pueblo perseguido, víctima del antisemitismo, por lo tanto las injusticias no se han podido abordar. Pero ya estamos en un momento en que los judíos están empoderados y ya no se puede decir que el judaísmo es vulnerable”.
En este punto, Feldman espera que “Unorthodox, Mi verdadera historia” genere un debate interno dentro del judaísmo: “Tenemos que encontrar formas de dialogar sobre nuestras experiencias, y aceptar que aquellos que quieran irse pueden hacerlo. Las comunidades judías tienen que tener una actitud positiva con quienes así lo quieren”, concluyó.