Con una amplia mayoría, el Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto de “Promoción del Acceso al Empleo Formal para Personas Travestis, Transexuales y Transgénero ‘Diana Sacayán – Lohana Berkins’”. La iniciativa – aprobada por 55 votos a favor, 1 en contra y 6 abstenciones – convierte a la Argentina en un país pionero en la aplicación de leyes de inclusión social.
La ley – que lleva el nombre de dos históricas militantes del colectivo trans – establece un cupo no inferior al 1 por ciento del total de los cargos en organismos de los tres poderes del Estado, entes públicos no estatales, organismos descentralizados o autárquicos y empresas y sociedades del Estado.

Además, la nueva norma prevé posibilidades de terminalidad educativa, incentivos en las contribuciones patronales en caso de contratar personal de este colectivo, así como también contempla el acceso a créditos en el Banco Nación con tasa preferencial para el financiamiento de proyectos productivos.

La diputada de La Pampa Norma Durango (FdT) enumeró los principales puntos del proyecto y destacó que “no se trata solo de brindar trabajo al colectivo, sino de legislar para que tengan plenos derechos dentro de la sociedad y que la sociedad respete su identidad travesti”.
“Estamos dando un paso histórico, estamos saldando una deuda histórica, estamos sentando las bases para reparar la desigualdad que existe en la sociedad respecto de las personas de este colectivo”, subrayó la legisladora.

Gladys González (PRO), quien se había manifestado en contra de la Ley de Matrimonio igualitario sostuvo que en aquel momento votó bajo una mirada “llena de prejuicios y llena de ignorancia, hoy no quiero que me pase lo mismo”, enfatizó y agregó: “Quiero reconocer y mirar al otro”.
La senadora por Corrientes, Ana Almirón (FdT) describió la discriminación que sufre este colectivo, que comienza ya en etapas escolares -que promueve la deserción escolar- y que se agrava a la hora de buscar trabajo. Al respecto, afirmó que “el acceso al trabajo digno siempre les fue negado, dejándolas siempre en la ilegalidad”.

“La sociedad expulsa a las trans y travestis a la calle y la sociedad no les permite estar en la calle”, aseguró la senadora neuquina Silvia Sapag (FDT), al marcar que el 90 por ciento del colectivo trans-travesti subsiste con el trabajo sexual, y que termina exponiéndolas a tantas violencias que provoca que su esperanza de vida no supere los 40 años.
Pablo Blanco, senador radical de Tierra del Fuego cambió su voto al escuchar los discursos y en lugar de abstenerse, adelantó su voto afirmativo antes de la votación.
El último orador, el diputado pampeano Daniel Lovera (FdT) destacó la importancia del artículo que prevé que toda persona travesti, transexual, transgénero no podrá ser rechazada por sus antecedentes penales, para acceder al cupo laboral que finalmente se convirtió en ley.