La Legislatura bonaerense debatirá hoy la adhesión a la Ley Nacional de Parto Humanizado. De aprobarse la iniciativa de la diputada del Frente de Todos, Mariana Larroque, la provincia de Buenos Aires daría el primer paso para dejar de ser uno de los tres distritos (junto a Formosa y Catamarca) que desde hace 16 años rechaza la norma. La legisladora explica la importancia de la ley.
La Ley Nacional 25.929 de Parto Humanizado, sancionada en 2004, es una herramienta normativa para prevenir y erradicar la violencia obstétrica ejercida en el proceso de embarazo, parto y post parto. La Provincia de Buenos Aires no adhirió a esta ley, pero en caso que hoy se logre su media sanción en la Legislatura, se daría un gran paso para saldar una deuda con las mujeres, las personas gestantes y los recién nacidos de todo el territorio bonaerense.
El crecimiento de casos de violencia obstétrica es alarmante y la cantidad de denuncias en el marco de la pandemia puso nuevamente en la agenda política a una forma de violencia que está “naturalizada e invisibilizada”.
En 2019 los nacimientos por cesárea llegaron al 35% en la provincia. Para la OMS, no debería superar el 15%.
En diálogo con Contraeditorial, la diputada Mariana Larroque destacó la necesidad de adherir a la Ley Nacional de Parto Humanizado “para avanzar en una verdadera implementación y un nuevo paradigma”. “Queremos – destacó – que las mujeres de la provincia puedan parir con derechos”.
La violencia obstétrica en números
Desde el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires aseguran que las cesáreas innecesarias siguen en aumento. En 2011 un 26 por ciento de los nacimientos fueron por cesárea, y en 2019, la cifra ascendió a un 35 por ciento. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que esta práctica no debiera superar el 15 por ciento.

Al respecto, la diputada del Frente de Todos detalló que en las instituciones privadas las cesáreas son mucho más frecuentes que en las públicas. “Es una diferencia abismal, un 30 por ciento se practican en el ámbito público frente a un 70 por ciento del privado”, aseguró.
En relación con las episiotomías -el corte en el periné que se le practica a las mujeres, desaconsejado por la OMS- la cifra asciende al 52 por ciento.
De los datos que se desprenden del Sistema de Información Perinatal, que brinda información respecto a la situación de las maternidades y la atención de los nacimientos, también surge que un 45 por ciento de las mujeres no son acompañadas durante el parto.
El 70 por ciento de las cesáreas se lleva a cabo en establecimientos de salud privados.
Parir en Pandemia
La crisis sanitaria que desencadenó el Covid-19, puso de relieve la necesidad de un marco regulatorio en la provincia de Buenos Aires para proteger a las mujeres, a las personas gestantes y a los recién nacidos de prácticas abusivas.
“Durante la pandemia los casos de violencia obstétrica aumentaron. En virtud de las medidas de prevención de contagio del Covid-19, algunos establecimientos, tanto públicos como privados, toman medidas que no están indicadas en ninguno de los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud”, manifestó la legisladora.
En este sentido, Larroque detalló que “dentro de las vulneraciones más frecuentes aparece el impedimento a que la persona gestante esté acompañada al momento de parir”.

“También es recurrente – agregó – la separación de la diada madre-hijo por horas o incluso días. Estos procedimientos, está demostrado, pueden producir daños psíquicos y emocionales, además de afectar el inicio de la lactancia materna, trayendo serias consecuencias difíciles de revertir”.
Un nuevo paradigma
La iniciativa de la legisladora bonaerense abre el camino para el despliegue de otras visiones sobre embarazo, el parto y el puerperio. “Este contexto que vivimos nos obliga a replantearnos el modo en el que los seres humanos nos relacionamos entre nosotros y con el mundo que habitamos. Por ello consideramos que la adhesión a la Ley de Parto Humanizado es el punto de partida para empezar a construir otro paradigma”, resaltó Larroque.
“Propiciar un trato respetuoso de la dignidad humana y generar un contexto amoroso para las personas que van a parir y para quienes llegan al mundo, es una necesidad ineludible para los y las bonaerenses”, afirmó.
“La adhesión a la Ley de Parto Humanizado es el punto de partida para empezar a construir otro paradigma”, señala Larroque.
El Estado presente
La legisladora del Frente de Todos destacó que desde su espacio político entienden que “el Estado es quien debe garantizar estos derechos” y que hoy “hay un gobierno provincial con la voluntad política para hacerlo”.
Por otro lado, valoró la labor de las organizaciones y colectivos que vienen trabajando la temática y “peleando por la adhesión”. “Es importante – señaló – que las personas gestantes puedan acceder a información que les permita decidir sobre sus cuerpos”.
Plan estratégico
La diputada provincial también presentó un proyecto de ley para la creación de un Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado, que acompaña la Ley de Adhesión y genera mecanismos para la implementación efectiva de los derechos que consagra la Ley Nacional 25.929.
Al respecto, Larroque señaló que los ejes principales de esta iniciativa son “garantizar el respeto de los procesos fisiológicos, la no medicalización y el cuidado del parto como hecho sexual”. Además, especificó que “el plan contempla la creación de una mesa de trabajo intersectorial con la participación de asociaciones y colegios profesionales, organizaciones de la sociedad civil y organismos de gobierno de la provincia de Buenos Aires”.